En el marco del Día Mundial del Corazón, conversamos con el Dr. Diego Echazarreta, médico cardiólogo Agremiado a la Agremiación Médica Platense, para conocer cuáles son los principales factores de riesgo en la Argentina, la importancia de los hábitos saludables, los avances en tratamientos y los controles médicos necesarios para cuidar la salud cardiovascular.
1. ¿Cuáles son los principales factores de riesgo que afectan la salud cardiovascular?
Por prevalencia, la hipertensión arterial, el colesterol elevado, la diabetes, la obesidad, el sedentarismo y el tabaquismo. A ellos se suman algunos que no podemos modificar, como la edad avanzada y los antecedentes familiares. El principal en la Argentina es la hipertensión arterial, lo que marca la necesidad de trabajar para reducir su impacto en la alta prevalencia de patología cardiovascular.
2. ¿Qué hábitos cotidianos podemos modificar para cuidar mejor nuestro corazón?
Cuando hablamos de hábitos saludables nos referimos a dos pilares: la alimentación y la actividad física.
En la alimentación, lo ideal es que sea balanceada, con frutas, verduras, fibras, carnes magras —incluyendo pescado— y legumbres, evitando grasas saturadas, azúcares refinados y, sobre todo, disminuyendo el sodio. Los alimentos procesados suelen tener altos niveles de sal y debemos evitar agregar más al momento de consumirlos.
En cuanto a la actividad física, se sugieren 150 minutos semanales, incluyendo ejercicios aeróbicos e isométricos, especialmente en adultos mayores para no perder masa muscular. Además, debemos procurar una vida ordenada, con menos estrés laboral y psicológico, que también influye en las enfermedades cardiovasculares.
3. ¿Cómo influye el estrés y el estilo de vida en la salud del corazón?
Definitivamente influyen. Estudios han demostrado que el estrés psicosocial y la depresión son factores de riesgo para enfermedad coronaria, pudiendo desencadenar infartos e insuficiencia cardíaca. También lo son el aislamiento social, la falta de apoyo emocional y los trastornos del sueño. Dormir menos de seis horas o tener un descanso de mala calidad aumenta el riesgo de arritmias, hipertensión e incluso mortalidad. Lo ideal es dormir entre 7 y 9 horas diarias.
4. ¿Con qué frecuencia deberíamos realizarnos controles médicos del corazón?
Depende de la edad y de los factores de riesgo de cada paciente. Lo recomendable es contar con un médico de cabecera y realizar controles cardiológicos al menos una vez al año, incluyendo examen físico, control de presión y electrocardiograma. En mayores de 30 años se sugiere sumar pruebas de esfuerzo y laboratorio. En personas con antecedentes, los controles deben ser más frecuentes: dos o tres veces por año.
5. ¿Qué estudios básicos recomienda para la prevención en personas sanas?
Un examen físico completo, con interrogatorio sobre antecedentes, hábitos y medicación. Además, electrocardiograma, radiografía de tórax y laboratorio básico con perfil lipídico, glucemia y función renal. Dependiendo del riesgo, se pueden sumar pruebas de esfuerzo, ecocardiograma o estudios vasculares.
6. ¿Existen síntomas iniciales a los que deberíamos prestar especial atención?
Sí: falta de aire en distintos grados, dolor precordial (en el pecho) que aparece con el esfuerzo y se calma en reposo, sudoración, palpitaciones y cambios en el ritmo cardíaco. En mujeres posmenopáusicas, los síntomas pueden diferir de los clásicos del varón, por lo que es clave no ignorar cualquier señal de alerta.
7. ¿Qué avances recientes se han dado en el tratamiento de las enfermedades cardiovasculares?
Hubo grandes avances en medicamentos preventivos, en angioplastias con stents y en técnicas mínimamente invasivas para reemplazo de válvulas. Hoy se puede colocar una válvula aórtica por catéter, sin abrir el tórax, o reparar válvulas mitral y tricúspide. También hay fármacos nuevos para insuficiencia cardíaca y progresos en genética e inteligencia artificial para personalizar tratamientos.
8. ¿Qué mensaje le daría a la población para tomar conciencia sobre el cuidado del corazón?
Lo más importante es conocer nuestras condiciones de salud y realizar controles periódicos. En Argentina, el 45% de la población tiene hipertensión arterial, el 40% colesterol elevado, un 32% obesidad y cerca de 11% glucemias elevadas. Cada año se registran unas 40 mil muertes súbitas. Estas cifras nos muestran que la prevención, los hábitos saludables y el seguimiento médico son fundamentales para salvar vidas.

Dr. Diego Federico Echazarreta
MP. 111028
Presidente Federación Argentina de Cardiología
Docente Facultad de Ciencias Médicas UNLP